Hoy es el día de los que celebramos este día todos los días. Por muy a tópico que suene, y del mismo modo que para una pareja “el día de los enamorados” no debería ser uno solo al año, para los docentes hoy no es un día más especial que el que será mañana.
De la misma manera que nuestro cumpleaños es un día y podemos celebrarlo el fin de semana siguiente (o anterior, los menos supersticiosos) sin que por ello prescriba el entusiasmo, nuestra (bendita) profesión debería ser celebrada el día menos pensado. Ese que, de repente, te hacen un regalo inesperado o, “simplemente”, te sonríen o lloran mientras te cuentan eso que nunca se habían atrevido a contarle a nadie.
Porque sí, ser MAESTRO es mucho más que ser docente. Es un compendio de profesiones que nadie nos ha enseñado a desempeñar y que ejercemos a base de buena voluntad y una vocación a raudales que complementamos, buscando huecos en los calendarios, a base de constante formación.
Así que cada 5 de octubre (o cada 27 de noviembre) debería ser un día más (o menos, para los más nostálgicos). No tendría ningún sentido que precisamente hoy diéramos la clase que siempre nos hubiera gustado dar o la que nuestros alumnos siempre han esperado recibir.
Lo mismo que un sobre de azúcar no nos debería recordar que estamos de paso y que tenemos que vivir, este día sí nos debería recordar que somos unos afortunados (tras lucharlo a pico y pala) por tener la profesión que tenemos y así, a partir de ahora, darle clase a la vida como si se fuese a acabar mañana…
7 comments
Te conozco como persona no como maestro (bueno alguna clase de teatro con piedras si tuve contigo, no sé si recuerdas);pero viendo cómo eres y todo lo que llevas encima se que no tendrás alumnos que no les guste tu trabajo tu esfuerzo diario dedicado solo para ellos es único. Besos M 😉
Te quiero maestro!???
Hijo hoy me voy a dormir y no me hace falta soñar porque mis sueños se han hecho realidad….
Después de leer tu blog y lo que tu hermano le han escrito desde la dirección de su empresa….hoy en vez de seguir nadando….quiero seguir soñando y cumpliendo sueños gracias a mis hijos…
Maestro de tantas personas, en las que me incluyo y padre de tantos niños sin tener hijos (entre ellos el mio, el nuestro)… tu belleza no la puedes esconder porque te sale por cada poro de la piel. Te quiero ??
Gracias por la información. Gran aporte de esta web. Saludos!
Precioso José Enrique, eres afortunado por tu profesión y más aún los que tienen la suerte de tenerte como profe en esas edades tan complicadas. Pues espero poder aprender y parecerme a ti aunque sea en una milésima parte, porque cada uno es único. Seguiré nadando.
Mi querido compañero y amigo. En los casi 30 años que llevo en esta maravillosa profesión no he visto a nadie tan bueno como tú. Eres mi ídolo. Tienes una energía envidiable!!! No cambies nunca!
Tesquiero!!